Dominicales 12 julio, 2009
Los terremotos, un fenómeno al que tradicionalmente no han estado acostumbrados la mayoría de los habitantes de Honduras, se han convertido en una nueva amenaza de la naturaleza para este país centroamericano. Honduras recibe la temporada de huracanes con el susto de un terremoto
- Muchos no se recuperan de los efectos del terremoto de finales de mayo, que además de daños materiales diversos, causó siete muertos y más de un centenar de heridos.
- Una de las pérdidas materiales más significativas fue la destrucción del puente “La Democracia”, símbolo de la ciudad de El Progreso.
- Los expertos dicen que los hondureños deben acostumbrarse a los movimientos sísmicos.
- Una de las pérdidas materiales más significativas fue la destrucción del puente “La Democracia”, símbolo de la ciudad de El Progreso.
- Los expertos dicen que los hondureños deben acostumbrarse a los movimientos sísmicos.
TEGUCIGALPA.- Los pobladores de la región norte y de la costa del Caribe todavía no se recuperan de los efectos del temblor de tierra de 7,1 grados en la escala de Richter que se registró el 28 de mayo pasado, en vísperas de que comenzase la temporada de huracanes, una amenaza más habitual para los hondureños.
El seísmo tuvo su epicentro unos 130 kilómetros al norte de la ciudad de La Ceiba, uno de los principales puertos del Caribe de Honduras, y a unos 36 de la paradisíaca isla de Roatán.
Ambos lugares son visitados con alguna frecuencia por ricos y famosos como el actor estadounidense Michael Douglas, el cantante español Julio Iglesias o el entrenador italiano de fútbol Fabio Capello, entre otros.
Lo que queda del puente La Democracia.
Al seísmo de mayor intensidad le han seguido más de 300 temblores, algunos de hasta 6,6 grados en la escala Richter, entre réplicas del primero y sacudidas originadas en otras fallas geológicas que cruzan el montañoso territorio de este país centroamericano, de 112,492 kilómetros cuadrados.
Debido al terremoto de mayo, que se registró a cuatro días de que comenzase la temporada de huracanes del Caribe, la Comisión Permanente de Contingencias de Honduras (COPECO) contabilizó siete muertos y 136 heridos.
A estas pérdidas de vidas humanas se suman la destrucción total de 1,382 viviendas y los daños causados a otras 9,458, según un informe del comisionado de la COPECO, Marco Burgos.
Otras infraestructuras que sufrieron daños parciales son 218 escuelas, 58 edificios públicos, 53 iglesias, 47 calles y carreteras; 35 puentes, 23 hospitales, 17 sistemas de suministro de agua potable, siete parques industriales, tres hoteles y un aeropuerto.
Los temblores también han destruido totalmente once escuelas, cuatro hospitales y tres edificios públicos, entre ellos el de los tribunales de justicia de San Pedro Sula, la ciudad más importante del norte del país.
El puente La Democracia no resistió el terremoto de mayo.
Las sacudidas más fuertes de tierra se han sentido en toda la región caribeña, norte, occidente, centro y oriente, con daños de diverso tipo en 12 de los 18 departamentos que tiene Honduras.
El terremoto de mayo también se sintió con fuerza en la capital, Tegucigalpa, que está unos 400 kilómetros al sur de La Ceiba, frente a cuyas costas se localizó el epicentro del movimiento telúrico.
El terremoto del 28 de mayo supone la mayor sacudida que ha recibido la población en la historia reciente de este país, donde todavía son visibles las huellas que dejó el poderoso huracán “Mitch” a finales de 1998, causante de un saldo de 5,657 muertos y pérdidas materiales valoradas en más de 3,000 millones de dólares.
“LA DEMOCRACIA”
Una de las obras más importantes de Honduras, inaugurada en 1963, es el puente “La Democracia”, construido por ingenieros franceses y que había soportado, entre otros fenómenos naturales, los descomunales huracanes “Fifí”, en septiembre de 1974, que dejó unos 10,000 muertos, y el “Mitch”, a finales de octubre de 1998.
El puente de arco, de más de 100 metros de longitud, no resistió el terremoto del 28 de mayo, que le desprendió su plataforma central, como si lo hubiera hecho una gigantesca grúa, dejando solamente las dos cabeceras arqueadas.
Centenares de familias perdieron sus hogares por el terremoto
La gran plancha central de hormigón y hierro quedó sumergida en la aguas del caudaloso río Ulúa, que nace en el occidente del país y desemboca en el Caribe.
El hermoso puente “La Democracia” era el símbolo de la ciudad de El Progreso, cuyos habitantes, durante décadas, utilizaron una balsa para cruzarlo, cuando iban o regresaban de ciudades vecinas como La Lima o San Pedro Sula.
El puente fue una de las grandes obras construidas durante la administración del liberal Ramón Villeda Morales, destituido por un golpe de Estado dado por el general Oswaldo López el 3 de octubre de 1963, pocas semanas después de la inauguración de “La Democracia”.
La obra pasó así a recordar la frágil democracia de los hondureños, marcada en la segunda mitad del siglo pasado -desde 1956 hasta 1980- por dos golpes de Estado perpetrados por el general Oswaldo López, quien el 4 de diciembre de 1972 derrocó a Ramón Ernesto Cruz, a quien le había entregado el poder en 1971.
En el segundo golpe militar, Oswaldo López Arellano, ahora convertido en un empresario que reside en Tegucigalpa, venía de cumplir un mandato presidencial de seis años, luego de quitarle el poder a Villeda Morales.
El terremoto de mayo agudizó la vulnerabilidad de Honduras.
Tras el terremoto, el paso por “La Democracia” ha sido sustituido por el puente paralelo “La Amistad”, una obra de reciente construcción donada por el gobierno de Japón tras la tragedia que dejó el huracán “Mitch”.
La donación japonesa también sufrió daños a causa del terremoto del 28 de mayo, por lo que un grupo de ingenieros nipones ha emprendido la elaboración de un estudio para determinar si se puede reparar o habrá que demolerlo y hacer uno nuevo, lo que sería otro golpe para la ciudad de El Progreso, una de las de mayor crecimiento en el país.
NUEVA AMENAZA
El terremoto de hace un mes en Honduras también dejó expuesto al país a un mayor peligro, el de las inundaciones durante la temporada de lluvias, que también comenzó en mayo y se prolonga hasta octubre o noviembre.
La mayoría de los bordes de contención en los ríos Ulúa y Chamelecón, que cruzan la región noroccidental de Honduras, sufrieron grandes grietas, por lo que las autoridades locales temen que se registren inundaciones graves.
Los alcaldes de los municipios de San Pedro Sula, El Progreso, Villanueva, Choloma, Potrerillos, Pimienta, La Lima y San Manuel, entre otros, lo mismo que los vecinos de aldeas, caseríos y fincas bananeras de la zona, han advertido que se pueden producir daños graves en toda la región que abarca el Valle de Sula, una de las más productivas del país.
Los efectos del temblor en el edificio de los tribunales de justicia en San Pedro Sula.
Para el físico Gonzalo Cruz, de la Universidad Nacional Autónoma de Honduras, sus compatriotas deberán de acostumbrarse a los movimientos sísmicos, porque el país está cruzado por unas fallas geológicas que durante muchos años han estado inactivas.
Cruz considera que difícilmente se producirá a corto plazo otro terremoto de más de seis grados en la escala Richter en el Caribe de Honduras, porque la mayor parte de la energía en esa falla ya fue liberada.
No obstante, ha advertido que se pueden dar otros fenómenos similares en cualquiera de las otras fallas que atraviesan el subsuelo de regiones como el norteño departamento de Yoro y la región fronteriza con Guatemala, conocida como la falla del Motagua.
Después del terremoto de mayo hubo familias en varias comunidades de Honduras que durante más de dos semanas estuvieron durmiendo en el patio de sus viviendas por temor a que la casa se les cayera encima.
El terremoto de hace un mes le hizo recordar a muchos hondureños otros fenómenos similares de gran magnitud ocurridos en El Salvador en octubre de 1986 y enero y febrero de 2001; el fuerte temblor de diciembre de 1972 que devastó Managua y el de febrero de 1976 en Guatemala, que dejaron miles de víctimas mortales y pérdidas materiales millonarias.
Si el “Mitch” dejó altamente vulnerable el territorio hondureño, el terremoto del 28 de mayo agudizó la situación, según los expertos en desastres naturales.
GERMAN REYES
Fotos de Gustavo Amador
EFE REPORTAJES.
Fotos de Gustavo Amador
EFE REPORTAJES.
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